Es curioso, cuando era un crío el verano acababa saturándome y aburriéndome. Tenía más tiempo libre, menos obligaciones (las únicas que me estorbaban eran las extraescolares, pero más que nada por eso, por ser una imposición), pero también se iban los amigos al pueblo (ese que yo nunca tuve), había que hacer más vida familiar (que uno nunca ha sido de esos vicios), o qué sé yo. Las alternativas no eran muchas, pero con el tiempo, según fui creciendo, todo fue cambiando. Hasta acabé enganchándome a la playa, esa de la que renegué durante años, y ahora no me planteo vivir lejos del mar, ni en verano ni en invierno.
El verano es esa época en la que me levanto con más energía, sonrío sin motivo con más frecuencia y me relajo con menos esfuerzo. Sí, aunque parezca irónico, a veces tienes que esforzarte para relajarte. Son más horas de luz, que dan vidilla… e incluso cuando llueve en Bilbao, como hoy, y el cielo está gris, no importa tanto si huele a verano. Y eso que acabo de volver de una escapada de 5 días a un destino paradisiaco de sol y playa.
Supongo que el hecho de empezar hoy el horario de jornada intensiva también ayuda a tener esta sensación de buenrollismo estival…
Por cierto, ya no queda nada para las primeras fiestas que huelen a verano: fiestas de Leioa, indispensables en la agenda Bizkaitarra. Nos vemos por allí.
¿Cuáles son vuestas sensaciones para este verano? Animaos y dejadme un comentario con alguna historieta, que no hace daño.
Es curioso porque cuando era un crío el verano acababa saturándome y aburriéndome. Tenía más tiempo libre y menos obligaciones (las únicas que me estorbaban eran las extraescolares, pero más que nada por eso, por tener que hacerlas por narices), pero también se iban los amigos al pueblo (ese que yo nunca tuve), había que hacer más vida familiar (que uno nunca ha sido de esos vicios), o qué sé yo. Las alternativas no eran muchas, pero con el tiempo, según fui creciendo, todo fue cambiando. Hasta acabé enganchándome a la playa, esa de la que renegué durante años, y ahora no me planteo vivir lejos del mar, ni en verano ni en invierno.
El verano es esa época en la que me levanto con más energía, sonrío sin motivo con más frecuencia y me relajo con menos esfuerzo (sí, porque aunque parezca irónico, a veces tienes que esforzarte para relajarte,). Son más horas de luz, que dan vidilla… e incluso cuando llueve en Bilbao como hoy y el cielo está gris, no importa tanto si huele a verano. Y eso que acabo de volver de una escapada de 5 días a un destino paradisiaco de sol y playa.
Supongo que el hecho de empezar hoy el horario de jornada intensiva también ayuda a tener esta sensación de buenrollismo estival… ^_^
Por cierto, ya no queda nada para las primeras fiestas que huelen a verano: fiestas de Leioa, indispensables en la agenda Bizkaitarra (vizcaína si trabajáis es televión o prensa). Nos vemos por allí.
Cuáles son vuestas sensaciones para este comienzo de verano? Animaos y dejadme un comentario con alguna historieta! Que no hace daño!
Feliz arranque de verano!
el verano…con dias como el de hoy me cuesta recordarlo..pero saldrá el sol, habrá tiempo para playear,cervecear ( a veces sin alcohol que hay q cuidar la curva de la felicidad..ah…ah…ah..ah..), y disfrutar de los largos findes ( sin currar sbdos! yuhuuuuuuu!! ) en las fiestas varias ..va a ser un buen verano, el primero bajo el mismo techo, asi que muy bueno..nos pondremos la tumbona en el balcon ( los tapones para el ruido ya los tenemos…) y nos iremos quitando el blanco nuclear que nos ha tocado..tu disfrutaras de tu jornada intensiva, harás algun que otro recadito extra debido a todo tu tiempo libre..y seremos felices, sin comer perdices…tendremos un nacimiento, una boda y quien sabe que mas..la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida…Bailamos?? un beso!
^_^
(recaditos extra??? juas juas juas…)
Es verano y me tengo que seguir levantando a las siete para trabajar… pero con más calor. Definitivamente el verano está perdiendo su encanto para mi.